De repente nos encontramos en un contexto en el que todo es genial y estamos flotando sobre las nubes de la alegría y la despreocupación: ¡llegó el CBD! ¡Y es legal! ¡Viva!
Multitud de páginas web, tiendas físicas por doquier, que este me ha dicho, que la otra me ha contado, que qué guay tía que puedo fumar y estar centrada para estudiar…La llegada de los productos de CBD han supuesto una verdadera revolución en los hábitos de consumo de muchísimas personas; para otras ha supuesto encontrar una alternativa natural para sus dolores y diversos
problemas de salud; también ha producido una explosión comercial, originando un auténtico boom en cuanto a la aparición de diferentes y variados productos procedentes del cáñamo. ¡La irrupción del comercio legal del CBD está cambiando nuestras vidas! Y además lo está haciendo de una forma muy rápida.
Si no quieres que te den gato por liebre, ni tener un susto con
la ley, ¡lee este artículo!
Como decíamos al principio, estamos viviendo un momento de éxtasis. ¿Poder fumar hierba sin colocón, con su sabor, aroma, su relajación, sin dar positivo en un control y que te permita hacer vida normal en todos los sentidos? ¿En serio? ¿Dónde hay que firmar? Pues sí, totalmente cierto, eso es posible.
Pero de repente, un día, vas con tus amig@s tranquilamente por la calle, os para la policía, os registra, os requisan vuestra bolsita y al tiempo…una multa llega a tu casa. ¿Pero qué ha pasado? ¿No habíamos quedado en que esto no era ilegal y no corríamos riesgos? ¿¿WTF??
La explicación al paquete que te van a meter y a tu sorpresa/desilusión es sencilla: TE HAN VENDIDO ALGO ILEGAL.
¿Pero cómo puede ser eso si esos cogollos de cbd no colocaban? Esto también es sencillo de explicar: El límite legal en contenido de THC está por debajo del 0,2%.
Puedes estar fumando unas flores de cbd con un 0,3 ó 0,4 ó 0,5 ó 0,6% de THC e incluso más, sin notar un efecto psicotrópico (realmente ese efecto comienza a notarse un poco antes de llegar al 1%, más o menos del 0,7 en adelante), pero por mucho que no te sientas colocad@ y sin saberlo, técnicamente llevas droga en el bolsillo. Y ahí la ley sí que no va a tener contemplaciones.
¿Cómo es posible que ocurra esto si lo compré de forma legal?
Se puede deber a distintos motivos. Lo primero es aclarar que cualquier empresa va a promocionar esos cogollos como si cumplieran con la ley, o sea, que van siempre a anunciarlos como cogollos que están por debajo del 0,2%. Lógico. Puede ser que la empresa que te lo vendió no sea consciente de lo que está vendiendo, por desconocimiento total del producto. También puede ser que quien te lo venda lo sepa, pero no le importe hacerlo. Hay de todo en este mundo. Sea como sea, te la han colado y el marrón es para ti. Si quieres saber cómo identificar el cannabis de CBD y diferenciarlo de la marihuana convencional, te vamos a echar un cable. ¡Te lo contamos!
¿Cómo diferenciar los cogollos de CBD de la marihuana convencional?
Lo primero que tienes que saber es que, por mucho que el agricultor utilice semillas de cáñamo certificadas por la UE, una vez cosechada la planta, el nivel de THC que hay en los cogollos es siempre superior al 0,2%. Este famoso porcentaje, 0,2%, es la media de THC de la planta entera, incluyendo tallos, hojas y cogollos. Como el resto de la planta no contiene THC, al hacer la media
con los cogollos, el nivel de THC baja sustancialmente. Bien. El problema que tenemos ahora es que hay unos cogollos unidos a una planta que tienen por sí solos más del 0,2%, pero que estando unidos a ella es menor. Así que, si se nos ocurriera separar uno de esos cogollos de la planta, aquí en España y casi toda Europa, tendríamos técnicamente droga en la mano.
¿Cómo se soluciona esto?
Hay que enviar esa cosecha (planta entera) a un país donde el límite legal de THC sea mayor y puedan manipular los cogollos de forma legal y donde puedan bajarles el contenido de THC. Ese país es Suiza.
¿Cómo se baja el contenido de THC a los cogollos?
Normalmente, los cogollos se lavan en agua, simple y llanamente. Al realizar este proceso, clave para obtener un producto legal, se elimina el exceso de THC, como una parte de los terpenos (lo que da sabor y olor al cogollo) y la resina que contienen. Normalmente, las flores cultivadas en España no suelen pasar por este proceso (a no ser que se envíen a Suiza a lavar) y dan resultados en THC superiores a lo legal establecido.
Entonces, ¿cómo diferenciar cogollos de CBD y marihuana ilegal?
Debido al proceso de lavado que anteriormente comentábamos, las flores de CBD tienen un color menos vivo, algo más oscuro que la marihuana. Otro aspecto que las diferencia es que los cogollos de CBD no son resinosos. Si son resinosos y se te pegan los dedos al trabajarla, no es marihuana de CBD. Otra característica que los distingue es el aroma.
Como decíamos antes, a consecuencia del lavado, se pierden terpenos, moléculas que le dan aroma y sabor al cogollo. Si abres el recipiente y apesta a marihuana, es marihuana, no flores de CBD. Lo mismo ocurre con el sabor. Un cogollo de CBD no puede saber exactamente igual que la maría convencional, es algo menos intenso. Es normal que el usuario busque un producto lo más parecido a la hierba de toda la vida, pero esta búsqueda tiene un límite: el 0,2%. Hay que aceptar que, para fumar algo legal, vamos a tener que acostumbrarnos a un pelín menos de sabor y aroma. Rápidamente uno se acostumbra y acaba por saborear y degustar los cogollos de CBD de la misma forma que antes.
¿Qué consecuencias puede tener usar flores de CBD con más del 0,2% de THC?
Las consecuencias son obvias:
Por un lado, si nos requisan la bolsita y la analizan, que la analizarán, y en el interior llevábamos un producto con un porcentaje superior al permitido, tendremos que preparar la cartera y esperar una sanción económica.
Por otro lado, dependiendo de cuánto sea el exceso de porcentaje en THC y cuál sea nuestro nivel de consumo, podemos dar positivo en un control de tráfico o en unas pruebas médicas laborales o de similar naturaleza.
Otras consecuencias posibles son los efectos negativos de un nivel de THC mayor en personas que no lo toleran y que padecen ansiedad o algún tipo de enfermedad mental.
Ahora ya sabes cómo diferenciar unos cogollos de otros. Naturalmente, en Cbdarium, estamos comprometidos con las buenas prácticas que hacen que tú tengas el mejor de los productos legales, sin trampa ni cartón.
No decimos que seamos los únicos que cumplan con la ley, hay más, lógicamente, pero si quieres comprar cogollos de CBD 100% legales, ¡nos haría
felices que nos dieras el gustazo de vendértelos nosotros!
